Hace unos meses os hablaba de El hombre fetichista. ¿Recordáis? Se trataba de una novela erótica que recopilaba una serie de relatos que la autora, la gran Mimmi Kass, había ido colgando en su web. Bien, pues hoy retomamos el fetichismo porque La mujer fetiche es la segunda parte de aquella novela.
En esta nueva entrega, Carolina sigue quitándose de encima convencionalismos, tabúes sexuales y demás lastres, de la mano de Martín. Pero no sólo avanzará en su liberación sexual con la ayuda de este. En esta segunda parte entrará en juego una tercera persona: Óscar, su jefe.
Puede que alguno ya esté pensando: Bueeeeno, ya tenemos el tercero en discordia. Ya tenemos todos los ingredientes para pasar de una novela erótica a un culebrón romanticón. Y quizá, con una novela convencional, puede que fuese así. Pero aquí lo convencional no se lleva mucho… Y una vez más, eso es lo que más me ha gustado de esta novela. Que, al igual que su protagonista Carolina, esta novela no se deja arrastrar por lo normativo, lo convencional, lo «que se espera de ella». No. Tanto Mimmi, la autora, como Carolina, son atrevidas, tienen las cosas muy claras y saben lo que quieren y cómo conseguirlo.
En el caso de Mimmi, supongo que nos quiere mostrar otro tipo de relaciones y también demostrar que, independientemente de que las compartas o no, no tienen nada de sórdidas, oscuras o enfermizas. Y os aseguro que yo, siendo abierta y públicamente vainillita, disfruté con todas y cada una de las escenas de alto voltaje de La mujer fetiche.
Con respecto a la protagonista, como dice Arola Poch en el prólogo (por cierto, pedazo de profesional para el prólogo): Carolina no será perfecta, pero tiene claro lo que quiere: ser libre y seguir disfrutanto de su sexualidad en libertad.
¿Pensáis que ambas alcanzarán sus objetivos? Pues estáis a un clic de descubrirlo. Lo que tardáis en conseguir esta estupenda novela.
¡Qué ilusión que te haya gustado! Me he reído mucho con lo de «vainillita». Espero que tus seguidores se animen a leerla y que la disfruten muchísimo.
Un abrazo enorme!!!???
Espero que sea así y se animen porque es una lectura que merece, y mucho, la pena lleno de momentos muy placenteros (guiño, guiño).
Besicos.