¿Sabes cuáles son tus derechos sexuales? Bueno, reformulo la pregunta, ¿sabes que existen los derechos sexuales? Espero que sí, pero bueno, si no es el caso, para eso estamos aquí hoy. ¿Los quieres descubrir? Allá vamos.
Aunque en algún que otro post ya hablamos un poco por encima sobre alguno de estos derechos, creo que no está de más refrescar y ampliar un poco la información, ¿no?
Lo primero que hay que dejar claro es que los derechos sexuales no aparecen de la nada. Quiero decir, que esto no es algo que alguien se sacase de la chistera un día porque se aburriese. No, ni muchísimo menos. Los derechos sexuales se fundamentan en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Ya sabéis, ese documento que recoge una serie de derechos humanos básicos y universales.
En concreto, es ese que dice que todo ser humano nace libre e igual, y que «toda persona tiene los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.»
Bien, pues basándose en estos principios universales de igualdad, libertad y dignidad, nacen los derechos sexuales. Y lo hacen aquí, en España. En concreto en 1997, cuando se celebró en Valencia el XIII Congreso Mundial de Sexología. En este congreso se proclamó la primera Declaración de los derechos sexuales. Un par de años más tarde, en 1999, la Asamblea General de la Asociación Mundial para la Salud Sexual (World Association for Sexual Health) la revisó y aprobó.
En esta declaración sostiene que la sexualidad es parte integral de todo ser humano y que:
Los derechos sexuales son derechos humanos universales basados en la libertad inherente, dignidad e igualdad para todos los seres humanos. Dado que la salud es un derecho humano fundamental, la salud sexual debe ser un derecho humano básico. Para asegurarnos que los seres humanos de las sociedades desarrollen una sexualidad saludable, los derechos sexuales siguientes deben ser reconocidos, promovidos, respetados y defendidos por todas las sociedades de todas las maneras. La salud sexual es el resultado de un ambiente que reconoce, respeta y ejerce estos derechos sexuales.
Ahora bien, ¿cuáles son estos derechos?
Declaración Universal de los derechos sexuales
Derecho a la libertad sexual
La libertad sexual abarca la posibilidad de los individuos de expresar su potencial sexual. Sin embargo, esto excluye todas las formas de coerción sexual, explotación y abuso en cualquier tiempo y situaciones de la vida.
Este derecho, lo que viene a decir es que yo y cualquiera puede hacer/decir/vivir su sexualidad como más le plazca sin necesidad ninguna de sufrir acoso, burla, amenazas, etc, etc, etc…
Derecho a la autonomía sexual, integridad sexual y seguridad del cuerpo sexual
Este Derecho involucra la habilidad de tomar decisiones autónomas sobre la vida sexual de uno dentro de un contexto de la propia ética personal y social. También incluye el control y el placer de nuestros cuerpos libres de tortura, mutilación y violencia de cualquier tipo.
Es tu sexualidad y la disfrutas como quieres, dentro de los límites legales, claro.
Lástima que este derecho aún haya que trabajarlo un poco, sobre todo la parte de «libre de tortura, mutilación y violencia«.
Derecho a la privacidad sexual
Derecho a tomar decisiones individuales y conductas sobre la intimidad siempre que ellas no interfieran en los derechos sexuales de otros.
Un recordatorio de lo básico: tu libertad acaba donde empieza la de los demás. Es decir, que está muy bien que vivas y disfrutes de tu sexualidad, siempre y cuando no invadas la de los demás. Vamos, que está muy bien que te masturbes, por ejemplo, siempre y cuando no lo hagas en la cara de nadie sin su consentimiento.
Derecho a la equidad sexual
Este derecho se refiere a la oposición a todas las formas de discriminación, independientemente del sexo, género, orientación sexual, edad, raza, clase social, religión o invalidez física o emocional.
Creo que aquí hay poco que explicar o aclarar.
Derecho al placer sexual
El placer sexual incluyendo el autoerotismo, es una fuente de bienestar físico, psicológico, intelectual y espiritual.
Repito: el autoerotismo y la masturbación es fuente de binestar físico, psicológico, intelectual y espiritual. Y este bienestar está al alcance de nuestra mano (guiño,guiño).
Perdonad el chiste malo. Ahora en serio, disfrutar de nuestra sexualidad es un derecho fundamental, ya sea en solitario o en compañía. Nunca lo olvidéis.
Derecho a la expresión sexual emocional
La expresión sexual es más que el placer erótico en los actos sexuales. Cada individuo tiene derecho a expresar su sexualidad a través de la comunicación, el contacto, la expresión emocional y el amor.
Básicamente lo que siempre hemos dicho. Que la sexualidad va más allá del sexo y/o de los genitales.
Derecho a la libre asociación sexual
Significa la posibilidad de casarse o no, de divorciarse y de establecer otros tipos de asociaciones sexuales.
Porque señoras y señores, decidir cómo (con papeles, sin ellos, con iglesia de por medio, sin iglesia…) y con quién o quiénes pasar el resto de la vida, si es que se quiere pasar con alguien, es un derecho sexual y, por tanto, un derecho FUNDAMENTAL. Nadie, absolutamente nadie, debería meter las narices en este asunto ni presionar en favor de una u otra opción. Se podrá compartir o no su decisión, pero nunca hay que olvidar que es eso, SU decisión y SU derecho.
¡No más presiones! ¡¡No más interrogatorios familiares en bodas, bautizos y comuniones!!
Derecho a hacer opciones reproductivas, libres y responsables
Esto abarca el Derecho para decidir sobre tener niños o no, el número y el tiempo entre cada uno, y el derecho al acceso a los métodos de regulación de la fertilidad.
Decidir si tengo o no hijos y el número de ellos, es MI/TU DERECHO SEXUAL. No es una decisión ni de vuestra vecina, de vuestra madre, ni de vuestra compañera de trabajo, ni de nadie. Igual que con el derecho anterior, recordad que es vuestra decisión y vuestro derecho, no la imposición de nadie. Y voy a dejar aquí el tema porque me caliento mucho con esto de las presiones sociales y el embarazo y, además, ya os he dado la brasa muchas veces con este tema. Tan sólo destacar que el acceso a métodos anticonceptivos, también es un derecho sexual.
Derecho a la información basada en el conocimiento científico
La información sexual debe ser generada a través de un proceso científico y ético y difundido en formas apropiadas en todos los niveles sociales.
El problema de este derecho es que hoy hay demasiada sobreinformación. Y dentro de esa información, hay demasiada desinformación. Creo que todos tenemos en mente alguna que otra cuenta con cientos de miles de seguidores que sueltan cada perlita que dices tú: Pero, ¡¿por qué?! ¡Si no hace más que soltar mierda!
En fin, intentad cribar y contrastar información. Y ante la duda, (y sin dudas) acudid a fuentes autorizadas, a profesionales del ámbito.
Derecho a la educación sexual integral
Este es un proceso que dura toda la vida, desde el nacimiento y debería involucrar a todas las instituciones sociales.
Este es un derecho que aún está en pañales. Una verdadera educación sexual se debe impartir desde el principio, no limitarse a cuando somos adolescentes, que ya está casi todo el pescado vendido, y no reducirlo todo a métodos anticonceptivos y/o enfermedades de transmisión sexual.
Derecho al cuidado de la salud sexual
El cuidado de la salud sexual debe estar disponible para la prevención y el tratamiento de todos los problemas, preocupaciones y desórdenes sexuales.
Derecho a tratamiento de enfermedades de transmisión sexual, disfunciones, terapia sexual… Es decir, derecho a asistencia ante cualquier problema de salud sexual. Relacionado con esto está el episodio del podcast dedicado a la sexología que grabé con Loli Pozo.
Estos sería los 11 derechos sexuales. Ahora que los conocéis, nunca olvidéis que los derechos sexuales son derechos humanos fundamentales y universales. Luchad por ellos.
Carla Mila dice
Muchas personas no son conscientes, en su amplia plenitud, que también en materia sexual tienen sus derechos. Bueno es recordarlo y más en estos tiempos.
Excelente post. Me encantó.
Gracias
Saludos
Maryasexora dice
Toda la razón. Si ya de por sí los Derechos Humanos los tenemos un poco de aquella manera, pues los sexuales ni te cuento… Nunca está de más refrescar conocimientos.
Besicos y mil gracias por la visita.
Carmen dice
Simplemente: ¡GRACIAS!
¡Un superabrazo!
Carmen
Maryasexora dice
A ti por la visita.
Besicos.
Ester Álvarez G. dice
Está muy bien recordar los derechos sexuales pues muchas personas aún no saben ni que los tienen… o deberían tenerlos ?
Maryasexora dice
Efectivamente, estoy segura que más de un/a no sabe ni que existen. Pero bueno, para eso estoy, para ejercer de cansina repetitiva, jajaja.
Besicos.
David Rubio Sánchez dice
Aunque el listado de estos derechos se centra en el ámbito de la libertad sexual perfectamente pueden ampliarse a todos los aspectos de la vida en sociedad. Sin duda, otro gallo nos cantaría si todos y cada uno de nosotros los llegáramos a interiorizar. Excelente, Mary. Un abrazo!
Maryasexora dice
Claro, estos derechos se fundamentan en los Derechos Humanos, digamos que son un spin off. Pero sí, lo que defienden se puede aplicar a cualquier ámbito.
Besicos.
Anuska dice
Estoy abrumada.. no sabía nada de esta declaración tan completa…
besitos,
Anuska
Maryasexora dice
Pues ahora toca divulgarlos y defenderlos!
Besicos
Anuska dice
y yo que me había quedado en el placer…. qué ingenua!!
Maria del Mar dice
Gracias, como siempre un placer leerte. Compartimos esta información tan importante y tan poco conocida en nuestras redes sociales 🙂
Maryasexora dice
Gracias a vosotras por difundirlos.
Besicos.
Anónimo dice
los derechos sexuales son fundamentales para nuestra vida porque sin ellos nuestra vida no sería la misma y sólo resiviriamos órdenes
☺️
Maryasexora dice
Por desgracia, los derechos sexuales suelen caer en el olvido.