by El Año Nuevo sumerio era una celebración de lo más erótica festiva en honor a la diosa Inanna, la diosa del amor, del sexo y la guerra. ¿Quieres saber cómo le daban la bienvenida al Año Nuevo?
Si fuesemos sumerios ahora mismo tendríamos que estar comiendo, bebiendo y follando en cada esquina. Peeeeero como no lo somos, me toca contaros en esta nueva entrega de sexo divino lo bien que se lo pasaban en esta fiesta en honor a la diosa Inanna.
Mito de Inanna
Inanna (para los acadios y asirios, la diosa Ishtar) era la diosa del amor, la fertilidad, la sensualidad, la procreación, de la guerra y la patrona de Uruk. Una de las deidades más importantes del panteón mesopotámico.
Inanna y Šukaletuda
Sobre Inanna hay varios mitos. Uno de los más conocidos tiene el dudoso honor de ser (tal vez) la primera agresión sexual registrada de la historia.
Inanna y Šukaletuda es un poema sumerio escrito allá por el año 2000 a.C en dos tablillas de arcilla que fue traducido por Samuel Noah Kramer en 1949.
Por resumirlo mucho, mucho, este poema nos cuenta que Inanna desciende a la tierra para inspeccionarnos un poquito, para separar a los justos de los criminales. En un momento dado, agotada de ir de aquí para allá, busca un sitio para descansar un poco y se queda dormida a la sombra de un árbol. Cuando Šukaletuda, el jardinero encargado del cuidado del jardín donde se encuentra dormida Inanna, la ve, se queda maravillado. Y, ni corto ni perezoso, decide besarla y, a continuación, penetrarla.
Sí, ella seguía dormida.
Luego, como si aquí no hubiese pasado nada, Šukaletuda se marcha.
[Luego ella se durmió]
Pero Šukaletuda separa el paño protector,
la besa y la penetra,
Tras lo cual volvió al extremo del jardín.
Pero sí que había pasado algo. Había violado a una diosa y esta, cuando se despertó y se dio cuenta de lo que había ocurrido, entró en cólera y empiezó a lanzar una serie de plagas sobre la Tierra para que su agresor se entregase o le entregasen. En la primera, convierte el agua en sangre.
Inanna se mira con detalle,
Y comprende que había sido ultrajada
¡Qué catástrofe provocó, la santa Inanna,
Por culpa del ultraje a su sexo! […]
Llenó de sangre todos los pozos (del país),
Introdujo sangre
En todos los depósitos de los jardines! […]
Y ella decía: “Deseo encontrar a mi agresor
Donde quiera que esté”
Pero Šukaletuda se encuentra escondido en casa de su padre y este, en vez de aconsejarle que se entregue, le dice que se pierda entre la multitud de la ciudad. Muy bien todo.
Finalmente, tras amenazar con abandonar el templo de Uruk, recordemos que ella era la patrona de esta ciudad, le entregan a Šukaletuda y ella puede consumar su venganza.
Pero decirde «perdonarle» a cambio de hacerle inmortal. Su nombre y su agresión se recordarán eternamente para que las futuras generaciones nunca olviden que Šukaletuda violó a la diosa Inanna.
Tu nombre nunca llegará a caer en el olvido,
Pervivirá en los cánticos – y serán cánticos suaves
En los palacios de los reyes
Los cantarán los jóvenes [trovadores (?)]
Y los past[ores] los canturrearán
Mientras baten el odre de leche.
Eternamente no sé si perdurará, pero 4000 años después, aquí estamos hablando del tema.
Año Nuevo en Sumeria
Ahora que ya conocemos un poquito más a Inanna, hablemos de cómo celebraban los sumerios su Año Nuevo.
Lo primero que hay que decir es que su Año Nuevo no coincede temporalmente con el nuestro. Los sumerios lo celebraban por estas fechas, a finales de abril.
Aunque a lo largo del año tenían varias festividades en honor de Inanna, esta era la principal. Y dentro de esta fiesta, el acto más importante era el matrimonio sagrado.
Matrimonio sagrado
Los sumerios pensaban que mediante este ritual sagrado, sus cosechas y su ganado estarían asegurados para el año siguiente.
¿En que consistía este ritual? En que el rey, en representación del dios Dumuzi, protector de los ganados y esposo de Inanna, se unía a Inanna. Vamos, que se acostaba con la gran sacerdotisa del templo de Inanna, la representante legal de ella para estos asuntos en la tierra.
El rey se aproxima, con la cabeza alta, a su regazo sagrado
Georges Roux. Mesopotamia: Historia política, económica y cultural. pág 106.
Se aproxima, con la cabeza alta al sagardo regazo de Inanna
se tumba junto a ella
Acaricia su sagrado regazo.
Cuando la Señora se tumba sobre su lecho,
en el sagrado regazo,
Cuando la pura Inanna se tumba sobre el lecho
en su sagrado regazo,
amor con él sobre su lecho.
Tras este acto se daba pistoletazo de salida al resto de la celebración: comida, bebida, ofrendas, baile, música y sexo, mucho sexo. Con la pareja, con la/el amante, con las concubinas, con las prostitutas sagradas… Durante días la lujuria corría por las calles de Sumeria en honor a la diosa Inanna.
Atribución:
La foto de portada es un relieve, posiblemente de Inanna, conservado en el Museo Británico. Foto bajo licencia de Dominio Público.
Fuentes:
- Estefanía Bernabé-Sánchez, 2018. El mito de Inanna y Šukaletuda: violencia sexual en Sumer.
- Sanz, Javier.Los inventos de los antiguos.
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