Lubricantes, uno para cada ocasión

Hoy en día, los lubricantes son casi tan populares y utilizados como los preservativos pero: ¿qué lubricantes son mejores para el sexo anal? y ¿para el acuático? ¿son mejores los de base de agua, los de aceite o los de silicona? ¿cuáles son compatibles con los preservativos? ¿hay algunos que sean comestibles? La respuesta a estas y otras preguntas la obtendrás sólo si sigues leyendo:

Los lubricantes íntimos no deberían ser unos desconocidos para nosotros puesto que hace un tiempo ya hablamos de ellos en otro post antiguo. No obstante, retomamos este tema para realizarles un examen más exhaustivo y ampliar conocimientos.

¿Qué son los lubricantes íntimos?

Un lubricante no es más que una sustancia grasienta o aceitosa que se utiliza para facilitar el movimiento de las piezas, reduciendo su fricción o haciendo que su rozamiento sea más suave. Bien, si esta definición la trasladamos al terreno íntimo, tenemos que los lubricantes íntimos están diseñados para mejorar las relaciones sexuales reduciendo la fricción que se pueda producir durante un contacto íntimo carnal o con un juguete erótico.

Hay una cuestión que me gustaría que quedase clara: Los defino como lubricantes íntimos, no como exclusivamente vaginales. La relación lubricantes/sequedad vaginal es evidente, pero no excluyente. Se pueden y deben aplicar a cualquier parte del cuerpo: ano, pene, pezones, interior de los muslos, cuello… Ya sabéis por todas esas zonas erógenas que tanto nos ponen a nosotras y a vosotros.

Lubricantes a base de aceite, silicona o agua, ¿cuál elegir?

Depende del tipo de relación que vayamos a tener, nos podemos decantar por unos o por otros.

• Lubricantes a base de agua: son los más populares, extendidos y recomendados porque son compatibles con los preservativos. Su principal componente es el agua, por lo que son fáciles de limpiar y no manchan, este dato a ellos quizás no les interese mucho, pero a nosotras sí, seamos sinceras. Digamos que este es el básico, el que debemos tener siempre a mano o en el bolso, lo cual me lleva a las monodosis, muy prácticas para llevarlas siempre encima por lo que pueda surgir. Un pequeño inconveniente que presentan es que como en su mayoría son agua, se reabsorben rápidamente, es decir, duran poco, pero la solución es sencilla, se echa más y listo. Muy recomendable para penetración vaginal y uso y disfrute de juguetes. No recomendado para uso acuático, porque irónicamente, agua y agua no hacen buenas migas.

• Lubricantes a base de aceite: son la oveja negra de la familia porque crean una capa que puede atrapar las bacterias, facilitando con ello posibles infecciones. Además, pueden estropear el preservativo y romperlo, así como fastidiar también nuestro juguete favorito. Por todo ello, son los menos recomendados y desde aquí ya os digo que os olvidéis de experimentar con cualquier producto relacionado con el aceite: aceites varios, vaselina, mantequilla o cualquier cosa que se os pase por la cabeza porque, además de nocivo, ni con el Kh-7 os saldrán las manchas… (Muy bien, se confirma, ya hablo como mi madre).
• Lubricantes a base de silicona: son más duraderos que los acuosos, no se abserben tan rápidamente y por lo tanto, hay que utilizar menos, lo cual nos ayuda a ahorrar en estos tiempos de desaceleración económica… Son mucho más suaves que los de agua y esto les hace ideales para el sexo anal, porque como todos sabemos ya, el ano no lubrica, os cuenten lo que os cuenten en Yahoo! respuestas. También son perfectos para el sexo en el agua, porque en este caso, agua y silicona casan. ¿Inconvenientes? Que son una parte oleosa y les hace arrastrar los problemas que hemos visto antes: manchan más que los acuosos y pueden estropear algún juguete, porque si acabamos de ver que agua con agua no casa, silicona con silicona tampoco. No hay tanto problema a la hora de usarlo con el preservativo, porque las fórmulas que se utilizan ahora los suelen hacer compatibles.

Lubricantes para ocasiones especiales…

• Lubricantes de sabores. Hoy en día hay lubricantes de cualquier sabor y aroma: chocolate, fresa, plátano… y para los extra golosos, ahora también hay ¡sabor piruleta y nubes! Por aclarar, cuando hablo de nubes, me refiero a las de gominola, a las típicas rosas que todos hemos quemado de pequeños (si no lo has hecho es porque no has tenido infancia), no hablo de nubes en plan místico: ¿a qué huelen las nubes? Como ya os podéis imaginar estos lubricantes son perfectos para el sexo oral. Suelen envolver con su aroma todo lo que se unta con él, lo que ayuda a superar muchas reticencias que suelen tener algunos a la hora de elaborar una cata en ciertas zonas calientes.

• Lubricantes efecto frío y calor. Este tipo de lubricantes son a base de agua, con todas las ventajas que hemos visto ya. Los de efecto frío suelen ser mentolados para aportar ese toque de frecor, pero tranquilos, es sólo un toque mentolado, no es como abrir un bote de Vick VapoRub y, ahora, hay algunos que directamente no huelen a nada. Para intensificar un poco más estos efectos, probad a soplar un poco la zona donde lo habéis extendido.

• Lubricantes de aloe vera. Este tipo de lubricantes son los más recientes o, por lo menos, yo son los últimos que he descubierto. Por si no lo sabéis, el aloe vera tiene efectos curativos, regenerativos e hidratantes, vamos, que es una maravilla de planta. Pero, ¿por qué os cuento todo esto? Porque si a estas características, le sumamos que es muy suave y duradero, se convierte en el complemento imprescindible para una buena sesión de sexo anal. De hecho, se dice/se comenta/se rumerea/me lo ha dicho una amiga, que existe un lubricante llamado Bacanal que es tan suave que es el más recomendado para practicar fisting. Por si hay algún despistado en la sala, recuerdo que el fisting es esa práctica que consiste en introducir de manera parcial o total la mano en el ano o la vagina de la pareja. Creo que con esta referencia ha quedado claro que lubricante debéis utilizar para una buena sesión de sexo anal.

Espero que tras leer este post os animéis a introducir en vuestras relaciones los lubricantes, porque como habéis podido leer, sirven para algo más que para la sequedad vaginal. Si es así, si os animáis a introducirlos en vuestras relaciones, comprarlos es tan fácil como ir a una de nuestras tiendas amigas y adquirirlos en un par de cliks, sí, incluido el Bacanal…