Aunque las estadísticas me dicen que la sección de Ilustres del sexo no es una de vuestras favoritas, esta entrada os tiene que picar un poco la curiosidad. No me digáis que no. Os voy a contar la historia de Marie Bonaparte, una mujer que, harta de no llegar al orgasmo a través del coito, no tuvo mejor idea que operarse para recolocar su clítoris… dos veces.
Marie Bonaparte nació el 2 de julio de 1882 en Saint-Cloud, Francia. Y por si alguien se lo está preguntando, sí, estaba emparentada con el Bonaparte que todos conocemos, con Napoleón.
El parentesco con Napoleón viene de la rama paterna. Su padre era Roland Napoleón Bonaparte y su abuelo Pierre Napoleón Bonaparte, uno de los sobrinos de Napoleón. Es decir, su padre era el nieto de un hermano de Napoleón. Esto creo que convierte a Marie de Bonaparte en sobrina bisnieta, o algo así, del famoso Emperador.
Su madre fue Marie-Félix Blanc. Para desgracia de nuestra protagonista, poco o nada pudo disfrutar de la compañía de su madre, ya que esta murió a las pocas semanas de dar a luz. Su abuelo materno, François Blanc, fue el fundador del famosísimo casino de Montecarlo, lo que permitió que Marie Bonaparte creciera rodeada de lujo. Sin embargo, ya sabemos que el dinero no da la felicidad y a la ausencia de su madre, tuvo que añadir la de su padre. No porque también muriese de forma prematura, sino porque pasar tiempo con su hija, pues no era una de las prioridades del señor Bonaparte.
La cosa empezó a cambiar cuando la niña empezó a tener edad de merecer. Ahí ya comenzó a mostrar más interés en su niña, pero porque había que «colocarla». Tenía que casarla bien. El elegido para este negociado fue el principe Jorge de Grecia y Dinamarca (1869-1957). El matrimonio concertado con Jorge parecía, en principio, el negocio del siglo. Él era miembro de la familia real griega y a ella, a pesar de la diferencia de edad (Jorge era 13 años mayor que ella), le hizo «tilín». Y es que según las crónicas de la época, él era bastante alto y guapo. Y yo añadiría que tenía un bigote muy señorial:
En vista de que todo el mundo estaba de acuerdo con este matrimonio, el enlace se celebró en 1907. Sin embargo, no todos los implicados en este acuerdo estaban igual de emocionados… Hay un pequeño detalle que se me ha pasado comentar, y es que el principe Jorge, además de alto, guapo y con bigotazo, era gay. Se dice, se comenta, se rumorea, que el gran amor de Jorge fue su tío Valdemor, principe de Dinamarca.
El caso es que entre Marie Bonaparte y Jorge, sólo hubo una relación de amistad y respeto. Bueno, eso y dos hijos: Pedro de Grecia (1908-1980) y Eugenia de Grecia (1910-1989). Ante este panorama conyugal, a Marie no le quedó otra que buscarse amantes y parece ser que la cosa se le dio bastante bien porque la lista fue considerable.
El problema es que no conseguía llegar al orgasmo a través del coito con ninguno de sus amantes. Y por si alguien se lo está preguntando: no, la opción de la masturbación ni se planteaba en aquella época. Pensad que estamos en esos años en los que si no había penetración de por medio, no había relación sexual. Todo lo demás, estaba mal visto o no se consideraba sexual, como el famoso masaje que se les realizaba a las mujeres para tratarles la «histeria femenina». Recordad que esto lo vimos cuando hablamos de la histeria femenina y el vibrador.
Marie Bonaparte y su estudio
Marie, que era una mujer inquieta, empezó a estudiar anatomía, fisiología y psicología para intentar dar con la respuesta a su problema. Empezó a estudiar y a investigar hasta desarrollar su propia tesis sobre el origen de su problema. Es más, en 1924, bajo el pseudónimo de A. E. Narjani, publicó los resultados de una investigación que llevó a cabo con 243 mujeres en la revista científica Bruxelles-Medical bajo el título: Considérations sur les causes anatomiques de la frigidité chez la femme. Traducido, literalmente, sería: Consideraciones sobre las causas anatómicas de la frigidez en las mujeres.
Aunque no he conseguido localizar este estudio por ninguna parte, por lo que he podido leer, las conclusiones a las que llegó Marie fueron que su problema se debía a una cuestión anatómica. Ella misma clasificó a las mujeres en tres grupos en función de la distancia entre el clítoris y la vagina y estableció una relación entre la facilidad de conseguir orgasmos y la distancia entre clítoris y vagina:
- Paraclitoridiennes. Mujeres cuya distancia entre clítoris y vagina era inferior a 2,5 cm. A este grupo pertenecerían la mayoría de sus encuestadas. Según su estudio, estas mujeres eran las que más disfrutaban de orgasmos durante el coito.
- Teleclitoridiennes. La distancia es mayor de 2.5 cm. Estas mujeres tendrían más dificultades para llegar al orgasmo durante el coito. A este grupo pertenecía Marie Bonaparte.
- Mesoclitoridiennes. La distancia son 2,5 cm clavados.
Como os he dicho, el estudio completo no he sido capaz de localizarlo, pero si alguien tiene mucha curiosidad, hay un libro (en francés) que trata sobre este estudio: Les 200 clitoris de Marie Bonaparte de Alix Lemel.
Marie Bonaparte y sus operaciones
Yo no sé si fue ella quien se puso en contacto con él o al revés, pero es tras la publicación de ese estudio cuando aparece en escena Josef von Halban, un ginecólogo vienés. Este señor vino a decir lo siguiente: si tu problema es que el clítoris está alejado de la vagina, pues vamos a «arrejuntarlos» un poco. Como esto dicho así, no tiene glamour ninguno, os voy a dar la descripción exacta de la operación. Operación a la que, por cierto, puso nombre y popularizó: operación Halban-Narjani. La descripción está sacada del libro La psiquiatría y sus nombres: diccionario de epónimos:
Basándose en la hipótesis de que la frigidez en las mujeres clitoridianas podía provenir de la excesiva distancia entre clítoris y meato urinario, se postuló una operación quirúrgica que consistía en realizar una aproximación clitórido-vaginal, por sección del ligamento suspensor del clíroris, sujeción de éste en los planos más profundos y fijación más próxima a la vagina, con eventual acortamiento de los labios menores.
¿Qué os parece? ¿Creéis que tuvo éxito esta operación? Pues evidentemente NO porque, entre otras cosas, como ya sabemos, lo que vemos del clítoris es tan sólo la punta del iceberg, una décima parte de su tamaño total.
El caso es que tras esta carnicería y una recuperación que tuvo que ser una fiesta, la cosa no mejoró nada de nada. Conclusión: pues nada, volvemos a recolocar el clítoris. Total, como a él no le dolía…
Marie Bonaparte y Freud
Y como éramos pocos, va y aparece Freud. Marie, depremida ante la nula mejoría tras sus operaciones, fue a visitarle para ver si él la podía ayudar. Recordemos que Freud fue el que dividió los orgasmos en dos: clitoridiano y vaginal. Siendo los orgasmos «buenos», los vaginales, los que tienen las mujeres maduras, mientras que los clitoridianos, son propios de mujeres inmaduras.
Como era de esperar, con el psicoanálisis tampoco encontró la solución a sus problemas pero, por lo menos, Freud la convenció para que no sometiera a una tercera intervención, algo es algo. A pesar de obtener nulos resultados, le atrapó tanto esta corriente que acabó convirtiéndose en una reputada psicoanalista y fue la que introdujo el psicoanálisis en Francia, con el beneplácito de Freud. A nivel personal, también entabló una gran amistad con él. Ella fue la que le ayudó a escapar del asedio nazi (Freud era judío), sacándole de Austria e instalándole a él y a su familia en Londres.
Marie Bonaparte murió el 21 de septiembre de 1962, a los 80 años, en Saint Tropez, Francia, sin haber tenido un orgasmo durante el coito. Lo cual no quiere decir que muriese sin saber lo que es un orgasmo…
Fuentes:
- www.pagina12.com: Medio centímetro de tristeza.
- www.sentadofrentealmundo.com: La princesa que nunca pudo tener un orgasmo.
- www.taringa.net: La mujer que movió su clítoris.
- www.xatakaciencia.com: La princesa que reubicó (dos veces) su clítoris para llegar al orgasmo.
Carla Mila dice
Fantástico artículo. Las historias de los personajes de nuestro pasado ahora ven la luz, y sus relaciones con el sexo. Del propio Napoleón se han contado muchas cosas, ahora me viene a la mente una que no se si será verdad. Su relación con Josefina era muy apasionada, y le gustaba tratarla como a una cortesana. Un día, regresando a París después de semanas en el campo de Batalla, le mandó un mensaje a través de un soldado. Parece ser que en él se decía. «No te laves, esta noche llegó a París». Con lo que era un buen amante de los olores más intensos de la mujer.
Son leyendas, saber si son ciertas con certeza, es imposible.
Saludos y gracias por compartir.
Carla Mila
Maryasexora dice
¡Uff! Como dices, de la vida de Napoleón y Josefina se ha dicho cientos de cosas. En este tema no me mojo, no sé si era o no amante de los «olores fuertes», lo que sí está claro es que ambos tenían una buena colección de amantes, aficción que parece que heredó su sobrina bisnieta.
¡Gracias a tu por la visita!
Besico
Mamanoleas dice
Es una historia muy interesante, sobre todo porque en aquella época una mujer tuviera la fortaleza para indagar sobre el porqué de su falta de orgasmos. Que sí, podría haber echado mano al clítoris y masturbarse, habría sido más sencillo, pero ya se sabe en la época victoriana… Me sonaba la historia, pero siempre es genial que nos amplíes información y nos hables de los ilustres del sexo.
Besotes.
Maryasexora dice
Claro, hay que ponerse en la piel de Marie. Hoy en día nos parece impensable hacer esto, pero para aquellos años Marie fue una pionera: investigar, estudiar e incluso publicar en una revista científica. Aunque la operación me sigue pareciendo una auténtica carnicería…
Besico.
tus juguetes sexuales dice
Asombrada estoy con esta historia, me parece buenisima! un beso!
Maryasexora dice
Me alegro mucho, de verdad. Disfruto muchísimo escribiendo este tipo de post y me encanta saber que vosotros también lo hacéis leyéndolos.
Un besico.
Friné dice
por aquí …
aprendiendo
teleclitoridiennes, dices, esto lo tengo que soltar yo en algún sitio, pues no voy a mirarlo en el el wikisexy, que sea lo que dios quiera
pero si montas un tele-chichi, esos datos están muy bien para atender por teléfono
– ¿Lo quiere Mesoclitoridiennes? o ¿maomeno?
Kissss y Kissss
Maryasexora dice
Bueno, ahora se acercan fechas muy señalas con familia y cuñados de por medio, en los que puedes soltar estas perlitas, jajaja
Besico
Nerea. El placer es mío dice
Artículo interesantísimo!!! Es realmente fascinante poder adentrarse en la historia para rescatar todo aquello que nos resitúa nuestra propia sexualidad y la de la sociedad actual. ??
Maryasexora dice
Me encanta que disfrutéis con estas historias porque, como ya he dicho, a mí me apasiona investigar y escribir sobre los «Ilustres del sexo».
Muchas gracias por la visita y por animarte a dejar un comentario.
Besicos
Orpherius dice
Un artículo estupendo, y muy instructivo. Había oído hablar de las dimensiones del clítoris, pero hasta ahora no había visto ningún gráfico (no me había molestado en buscarlo, qué perezoso). Enhorabuena por el texto, Maryasexora. Escribes estupendamente. Saludos.
Maryasexora dice
¡Muchas gracias! El clítoris es mucho más grande de lo que pensamos. Lo que vemos, tan sólo es la punta del iceberg… Bueno, ahora ya sabes cómo es el clítoris, nunca es tarde, jajaja
Muchas gracias por la visita y por animarte a dejar un comentario.
Un saludo.
Anuska dice
jo, pobrecita! no me queda claro si con todo eso disfrutó del sexo alguna vez…
besis!
Anuska
Maryasexora dice
Tiene pinta de que poco, la verdad.
Besicos.
Ana dice
uf… qué penita…
Besis!
Anuska
Maryasexora dice
La verdad es que la mujer no pudo o supo disfrutar de su sexualidad.
Besicos.
Ana dice
me pregunto si alguien le lió la cabeza…. con lo fácil que es disfrutar….
besitos,
Anuska
María José dice
Muchas gracias por la aportación y el artículo.
Un saludo
Maryasexora dice
Gracias a ti por la visita y el comentario.
Besicos.
Pau Campo dice
a ver, una mujer apasionada, tuvo muchos amantes, gente guapa, experimentada, adinerada, instruida, digo yo que a más de uno se le ocurriría pasar la lengua por la zona además con arte, seguro
Maryasexora dice
Pues no sabría qué decirte porque satisfacer a una mujer no entraba en los planes de muchos… Si hoy en día todavía se piensa que el sexo solo es coito, pues imagínate en una época en la que ni se pensaba que la mujer pudiera tener deseo sexual…