Masajes eróticos en tiempos de COVID-​19

Distancia social. Este término ya lo tenemos grabado a fuego para nuestro día a día. Para poder estar con amigos, ir al súper, al parque… Pero, ¿qué pasa con aquellos negocios o servicios en los que no es posible la distancia social? Por ejemplo, ¿qué medidas se pueden tomar para dar masajes eróticos en los que el contacto piel con piel es necesario? ¿Toman medidas quienes proporcionan estos servicios?

El centro de masajes eróticos Majestic nos saca de dudas sobre cómo está afectando esta pandemia a los centros de masajes eróticos en general y qué medidas están tomando ellas en particular.

¿Cómo está afectando esta pandemia a los centros de masajes eróticos?

Pues creo que no hay que ser un experto en estudios de mercado para imaginar que no están pasando por su mejor momento. Con o sin final feliz, no son buenos tiempos para darse masajes.

Y es que si ya de por sí nos puede dar un poco de reparo ir a cualquier tienda o local aún sabiendo que podemos mantener una distancia y/o no tener contacto con nadie, imaginad el recelo que se puede tener ante la idea de que alguien desconocido recorra todo tu cuerpo.

Pero no solo es eso, la limitación de movilidad tampoco es que juegue a su favor. Entre PCR, cuarentenas, cierres perimetrales… los viajes brillan por su ausencia. Y teniendo en cuenta que la mayoría de sus clientes son personas que viajan, normalmente, por motivos laborales pues…

Resumiendo, entre «la cosilla» que le puede dar a muchos usuarios volver a disfrutar de estos masajes por el posible contagio y que con las restricciones de movilidad, el teletrabajo y las videollamadas, ya casi no se viaja, la cosa pinta mal.

Necesidad de contacto

Sin embargo, aunque el número de visitantes habituales de los centros de masajes eróticos ha descendido notablemente, también ha llegado un nuevo perfil de clientes.

Porque trabajar desde casa en pijama, mantener reuniones sin tener que salir de tu hogar, hacer la compra online, pedir comida a domicilio… vamos, no tener que salir para nada, ni tener que mantener contacto con nadie, está bien «pa un ratico». Pero año y pico así, cansa. Y mucho.

Y esta soledad y falta de contacto es la que ha atraído a una nueva clientela. Personas que seguramente antes de la pandemia, ni habían pisado un centro de masajes, ni se les había pasado por la cabeza solicitar este tipo de servicios, ahora acuden semanal o mensualmente.

En Majestic están muy contentas y orgullosas por esta nueva fidelización y confianza depositada y explican que si esto ha sido posible es gracias a la calidad de su servicio y la cercanía en el trato. Pero también, a las estrictas medidas de higiene que aplican.

Medidas de higiene

Cuando hablamos de cómo limpiar nuestros juguetes eróticos, ya dijimos que no hace falta dejarse llevar por esta vorágine aséptica, pero sí aplicar unas medidas básicas de higiene. Punto de vista que comparten en Majestic.

Así que no, si acudís a Majestic no vais a encontrar a masajistas en trajes NBQ, pero sí las siguientes medidas:

• Gel hidroalcohólico a la entrada y salida del centro. Ya sé que usarlo no da el mismo placer que utilizar geles o aceites de masajes, pero es justo y necesario.
• Mascarilla quirúrgica en la salida por si es necesario cambiarla antes de abandonar el Centro. En este punto hay que dejar claro que tanto el personal del centro, masajistas, como clientes, deberán llevar mascarilla en todo momento. Sí, lo sé. No es lo más ideal, pero volvemos al punto anterior, por el momento, es necesario.
• El material desechable se trata como hasta ahora se había hecho. Vamos, que se desecha después de cada uso. Las zapatillas desechables que deben utilizar los clientes, las sábanas de papel, materiales de un sólo uso… al finalizar la sesión se recogen y se tiran directamente a la basura.
• Se desinfecta todo el material no desechable. Por ejemplo, las piedras de basalto que utilizan las meten en agua caliente con un poquito de lejía durante una hora, y luego las aclaran, antes de volver a usarlas.
• Ventilación y desinfección de la sala de masaje, incluyendo todo el material que permanece en la misma, y de los espacios comunes después de cada servicio. La ducha, que es obligatoria antes y después del masaje, también se desinfecta después de cada uso. Para para poder limpiar y desinfectar correctamente, están espaciando más las citas dando margen suficiente entre clientes.
  

Así que ya sabéis, si queréis disfrutar de un buen masaje erótico sabed que es posible incluso en tiempos de COVID-19.