Si os gusta el sushi y queréis disfrutar de un San Valentín diferente, os propongo que preparéis nyotaimori. ¿Que qué es el nyotaimori? Una cena/comida a base de sushi o sashimi servido en el cuerpo desnudo de una mujer. Apetecible, ¿verdad?
Origen del nyotaimori
Pues no se sabe exactamente. Hay teorías para todos los gustos. Que si era una práctica de las geishas, que si se remonta al periodo Edo, que si Japón no tiene nada que ver en todo esto y es un invento occidental…
De entre este revoltijo de teorías, la más extendida es la que sostiene que el nyotaimori es una variente del «sake wakame»: beber sake en la entrepierna de la mujer. Un servicio que, por lo visto, ofrecían ciertas prostitutas a sus clientes.
Por cierto, he leído por ahí que esta práctica se denomina así porque el vello púbico «bañado» en sake se asemeja al wakame, una alga comestible, flotando en el océano…
El caso es que parece ser que el nyotaimori se popularizó bastante en Japón en la década de 1960. En esos años hubo un boom de viajes de empresa. Las empresas llevaban a sus empleados, mayoritariamente (por no decir todos) hombres, a balnearios y/o complejos termales para recompensarles por sus esfuerzos laborales.
Ante la avalancha de hombres deseosos de pasarlo bien, los distintos complejos empezaron a competir para llevarse la «tajá «más grande. Vamos, para conseguir el mayor número de clientes.
¿Cuál fue el mayor reclamo publicitario que utilizaron? Los servicios sexuales. Se dice, se cuenta, se rumorea, que el pionero en ofrecer el nyotaimori entre su cartera de servicios fue un complejo turístico de aguas termales situado en la Prefectura de Ishikawa llamado Yamanaka Onsen.
Pero eso es lo que asegura la rumorología. Realmente no se puede confirmar o desmentir porque pruebas no hay. Este tipo de servicios se hacían de tapadillo. Vamos, que no se incluían en su folleto propagandístico. Tan sólo hay los típico testimonios de: yo tengo un amigo que me ha dicho que…; conozco un tipo que se fue a Yamanaka Onsen con la empresa y…
Nyotaimori en casa
Aunque hay restaurantes que ofrecen este tipo de degustación erótica festiva, la mayoría son en «plan unga-unga». ¿Qué quiere decir esto? Que suelen ser locales para despedidas de solteros donde la testosterona, el alcohol y las ganas de fiesta priman muchísimo por encima de la belleza, la estética y el erotismo.
Quizá por eso se tilda a esta práctica de sexista, degradante, humillante… Y no niego que en ese contexto de shows para despedidas lo sea.
Pero qué queréis que os diga, a mí me parece que tiene su puntito saborear y degustar un buen sushi sobre el cuerpo de tu pareja.
Por eso, porque me parece una idea original, erótica, apta para todos los bolsillos y que se puede hacer este día como cualquier otro, os la propongo.
Nyotaimori o nantaimori
Estamos hablando siempre de que en esta práctica la bandeja donde se sirve la comida es el cuerpo de la mujer, pero también puede hacer la «función de plato» el hombre. En ese caso, se denomina nantaimori.
Eso sí, tanto si es él como ella, que la bandeja esté limpita… Aunque en el nyotaimori tradicional la comida nunca toca el plato porque el sushi se presenta sobre hojas de plátano, si lo hacemos en petit comité, las piezas de sushi las podemos poner directamente sobre el cuerpo. Y para eso, una buena ducha es primordial.
Sushi o lo que sea
Como os decía, esta es una práctica para todos los bolsillos. Que nos sentimos espléndidos, pues pedimos sushi en el mejor restaurante de la ciudad. Que la cosa anda más justa, pues a la que paramos a comprar los bombones en el súper, pillamos una bandejita de sushi.
Una vez más, lo típico es que el menú sea a base de sushi o sashimi. Pero en la intimidad de nuestro hogar lo podemos readaptar al gusto de los comensales: piezas de fruta, jamón, gominolas, bombones… Lo que os plazca.
Tocar o no tocar el plato, esa es la cuestión
Si queremos ser puritanos, no se debería tocar el cuerpo. Lo habitual es llevarse la comida a la boca con la ayuda de los palillos. Pero, como antes, cada casa, sus normas.
Podemos utilizar las manos y rozar con el dedo por aquí, provocar una cosquillita por allí… O directamente atraparla con la boca… Pero no usemos tenedores, por favor.
El caso es pasar una buena velada gastroerótica.
Fuentes:
Atribución:
La autoría de la imagen de portada «Nyotaimori (bodysushi)» es de Edith Soto. Licencia: CC BY-SA 2.0
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