Satisfyer Men Vibration. El masturbador vibrador

Si estás cansado de las mangas masturbadoras y lo que buscas es una estimulación diferente, quizá te interese conocer un poco mejor el Satisfyer Men Vibration. Un masturbador masculino con 14 modos distintos de vibración.

Antes de empezar con las características técnicas y la review quisiera dejar claro desde ya que este Satisfyer Men Vibration no es una manga masturbadora. No está diseñado para masturbar todo el tronco del pene.

Y es que la mayoría de las quejas que he leído sobre este juguete por ahí están relacionadas con este malentendido: «es muy pequeño», «es para micropenes», «no me entra»….

Y no, no es que sea muy pequeño, es que es un juguete para estimular el glande y los primeros centímetros del pene. Por ello, la longitud de penetración es de 7 cm.

Por eso no quiero que nadie se equivoque o se sienta engañado y quiero aclararlo desde el principio: El Satisfyer Men Vibration está diseñado para estimular solo la punta del pene, no todo el pene.

Así que si lo que buscas o quieres es un masturbador que te envuelva todo el pene, tal vez Satisfyer Men se ajuste más a tus gustos. Si por el contrario, estás dispuesto a experimentar un tipo de estimulación diferente y más centrada en el glande, sigue leyendo.

Contenido de Satisfyer Men Vibration

• El propio masturbador Satisfyer Men Vibration. Un juguete acabado en negro y fabricado en plástico ABS y silicona médica.
• Cable cargador magnético USB.
• Folleto de instrucciones y seguridad.

Características técnicas

• Compacto pero manejable. Aunque solo son penetrables unos 7 cm, el juguete en su conjunto mide unos 15 cm. Su peso es de 300 gr, que dicho así no suena a mucho, pero a mí se me hace un poco pesado. Eso sí, es muy fácil de manejar y se adapta perfectamente a la mano.
• Recargable. Las baterías de litio se con el cable de carga magnético por USB. Dos horas y media de carga aseguran una de placer.
• Resistente al agua. Sinceramente, creo que este juguete se presta mucho a una ducha/baño relajante. Capricho que os podéis dar de forma segura gracias a su sistema de estanco IPX7.
• 14 modos de vibración. 4 grados de intensidad en modo vibración continua y 10 modos distintos de vibración: onda creciente, decreciente, pulsos…

Manual de uso y disfrute

• Asegurarnos que está cargado y listo para su uso. Mientras carga, la luz parpadeará. Sabremos que ya está completamente cargado cuando la luz permanezca fija.
• Limpiar. Antes de usarlo y, sobre todo, después de cada uso, darle un agua con un poco de jabón y dejarlo secar, siempre que se pueda, al aire. La ventaja de este juguete es que al no ser una manga masturbadora, su limpieza es mucho más sencilla.
• Lubricar. Para que todo fluya mejor, ayudaros de un lubricante de agua. En este caso es bastante necesario el lubricante porque si el pene no está lubricado, la vibración en el glande puede resultar desagradable e incluso dolorosa.

Jugar

Fácil y sencillo. Hay dos botones de control: «+» y «-«. Para encenderlo y apagarlo hay que hacer una pulsación larga de unos dos segundos en el botón «+».

Para cambiar de ritmo o intensidad, tan fácil como ir apretando el botón «+» o «-» en función del gusto de cada cual.

Valoración del Satisfyer Men Vibration

Una paja diferente

Para ser exactos, las palabras del esclavo informático fueron: «Es raro. No es que sea desagradable. Es raro.«

Ya sabemos, o deberíamos saber, que raro no es sinónimo de malo. Pero como aún en sexualidad la palabra raro se asocia a algo malo, he preferido usar el término diferente para definir la experiencia.

Y realmente creo Satisfyer Men Vibration ofrece una estimulación distinta.

Primero porque uno está acostumbrado a la paja tradicional, «al sube-baja». Y con este juguete no se puede. No da juego para ello. No hay espacio. Una vez más, os recuerdo que solo es para la punta del pene.

Segundo porque uno no está acostumbrado a la vibración en el pene, en concreto, en el glande. En este punto el esclavo informático me dejó claro que lo de los distintos modos de vibración, a él, «ni fú ni fá».

Creo recordar que sus palabras fueron algo así como: «mira, creo que nuestros penes no son tan sensibles pá estas cosas». Vamos, que le dio igual la vibración ascendente, descendente y la madre que lo programó. Que pasado un rato ya no sabía ni en qué modo estaba ni cómo le vibraba.

Eso sí, para su gusto le falta algo de potencia. Lo que me dio a entender es que prefería más intensidad en la vibración y que le sobraban modos.

Otra cosilla que le perturbó un poquito fue el ruido. No es que el juguete en sí sea muy ruidoso, que no lo es. Es que al usar lubricante, si a parte de la vibración intentas hacer un poco de «metesaca» del glande (porque el cuerpo lo pide), el «chop, chop, chop», «el chapoteo» que se crea es bastante sonoro y un tanto desconcertante.

Lo que sí le gustó mucho es lo bien que se adapta y se maneja con la mano. Dijo que era muy ergonómico y sencillo.

En resumen:

Si lo que se busca es una «paja de desahogo», vamos, masturbarse para correrse, quizá esta no sea la opción más adecuada porque es una sensación a la que no se está habituado y va a faltar ese puntito de movimiento mecánico «metesaca» que pide el cuerpo.

En cambio, si lo que queremos es una sesión de mimos, de relax, de disfrutar de un baño a solas o de jugar con nuestra pareja, sí es una buena elección. Porque las sensaciones aunque sean muy diferentes, son muy agradables.

Si te animas a probarlo, puedes adquirirlo en la tienda de Maryasexora.