Vibrador Bonnie de Svakom. Doble cabezal, doble placer

Bonnie es un vibrador de la marca de juguetes eróticos de alta gama Svakom. Un vibrador con doble cabezal que permite tanto la estimulación externa, clítoris y zonas erógenas, como interna, estimulación del punto G.

Contenido del vibrador Bonnie

• Vibrador en color plum red (rojo ciruela, aunque a mí me parece rosa) y con forma de varita.
• Cable USB para cargar la batería.
• Funda de tela para su correcta conservación y transporte.
• Tarjeta de garantía de un año.
• Instrucciones de uso. En esta ocasión vienen por duplicado. Por una parte tenemos una guía rápida y visual de sus características y modo de uso, y luego también incluyen el típico manual de instrucciones en varios idiomas.
• Folleto de seguridad con consejos para el mantenimiento de la batería y la conservación del juguete.

Características técnicas

• Vibrador de unos 19 cm con forma de varita recubierto en silicona ultra suave.
• Doble motor. Dos motores independientes, uno por cada cabezal.
• Doble cabezal. El más grande mide unos 5 cm de diámetro y es con el que recomienda la marca estimular el clítoris. Digo recomienda porque esto va un poco a gusto de consumidora. No hay que seguir la indicación al pie de la letra. Se trata de probar, jugar y elegir lo que a una más le guste. Yo, por ejemplo, prefiero el pequeño.
• Cabezal pequeño muy flexible. De unos 2 cm de diámetro y este sí que está diseñado para la estimulación interna. Su cabezal es muy flexible, se puede «moldear», para facilitar la estimulación del punto G.

• Sumergible. Nos puede acompañar en un baño relajante, pero no nos vengamos arriba que nos es para bucear bucear con él. Vamos, que las altas profundidades no las cubre la garantía.
• Recargable. Una hora de carga nos proporcionará tres de uso y disfrute. Y un correcto mantenimiento de la batería nos asegura más de 100 cargas y descargas, lo que se traduce, a ojo, en chorrocientas horas de placer.
• Silencioso. Bueno, aquí tengo que decir que es silencioso a medias. Si nos decantamos por utilizar el cabezal pequeño, vale, sí es silencioso. El grande, ya tal… La verdad es que la vibración del cabezal grande es bastante potente y algo ruidosa.
• 11 modos de vibración.
• Materiales ecológicos. Esto quiere decir que está elaborado con silicona de grado médico y que cumple las directivas del ROHS y la WEEE. (Esto os lo comento para demostrar que me he leído el folleto de seguridad.)

Manual de uso y disfrute

• Asegurarnos que está cargado. El punto de conexión está sobre el cabezal grande, en la parte opuesta de los botones de control. Durante la carga, la luz será intermitente. Una vez que esta finalice será fija.

• Limpieza. Antes de utilizarlo por primera vez y después de cada uso, hay que limpiarlo con agua y jabón neutro. Después se puede dejar secar al aire o secarlo con alguna toalla o paño que no suelte mucho pelillo porque se suelen pegar bastante a la silicona. Para conservarlo mejor, lo guardaremos en la funda que viene incluida con el vibrador Bonnie.
• Lubricación. Sobre todo si se va a utilizar de manera interna. Como siempre, recordad que al ser un juguete realizado en silicona, el lubricante que tenemos que utilizar debe ser de agua.
• Empezar a jugar. Como hemos dicho que dispone de dos motores independientes, podemos optar por jugar con el cabezal pequeño, con el grande o con ambos a la vez. Hay tres botones de control. Si cogemos el vibrador por la base, por el cabezal más grande, veremos un triángulo, una «S» y un triángulo invertido. Con el triángulo, que señala el cabezal más pequeño, controlaremos este. Con el invertido que parece señalar y que está mas cerca del grande, manejaremos el cabezal grande. Y con el botón que se encuentra entre ambos, activaremos los dos cabezales y el modo clímax.

Jugar con el cabezal pequeño

Para encenderlo hay que hacer una pulsación larga de unos 2-3 segundos en el botón del triángulo. Si queremos cambiar de modo de vibración, debemos realizar pulsaciones cortas en ese mismo botón. Una vez que finalicemos nuestra sesión, lo apagaremos realizando nuevamente una pulsación larga. Como veis no tiene mucha pérdida. El mismo botón nos sirve para encender/apagar y cambiar el tipo de vibración.

Eso sí, si queremos activar el modo clímax, un modo de vibración especial o extra que tiene este vibrador Bonnie, tenemos que pulsar el botón central, el que viene identificado con una «S». Para salir de este modo, volveremos a pulsar el botón triángulo.

Jugar con el cabezal grande

Básicamente hay que repetir los mismos pasos anteriores pero con el botón triángulo invertido. El que se encuentra más cerca del cabezal grande. Para encender/apagar haremos una pulsación larga y para cambiar de modo, pulsaciones cortas.

De nuevo, si deseamos activar el modo clímax en este cabezal, pulsaremos el botón central. El que viene indicado con una «S».

Jugar con ambos cabezales

Para disfrutar de ambos cabezales a la vez, tendremos que hacer una pulsación larga (2-3 segundos) en la «S», el botón central. Una vez activado, podremos cambiar los modos de vibración tanto del cabezal grande como del pequeño como lo haríamos de manera independiente. Botón triángulo para manejar el cabezal pequeño y el triángulo invertido para el grande. Y una vez más, se apaga igual que se enciende, con una pulsación larga en la «S».

El modo clímax se sigue iniciando de la misma manera. Con una pulsación corta en el botón «S».

Como dicen que una imagen vale más que mil palabras y entiendo que esto de los botones así explicado puede que no quede claro, os dejo esta imagen del manual que seguro os sirve de ayuda y os aclara las dudas que os haya podido generar.

Mi valoración sobre el vibrador Bonnie de Svakom

Masajeador potente y con potencial

Lo primero que me gustaría destacar es la flexibilidad de su cabezal pequeño para la estimulación del punto G. Desde mi punto de vista, creo que este es el punto fuerte de este vibrador. El que se pueda mover y ajustar al gusto de la consumidora.

En general, la estimulación que ofrece el cabezal pequeño me ha gustado bastante. Es silencioso, flexible y fácil de manipular. Tan solo hay que manipular un botón.

En cambio, para mi gusto, el cabezal grande es demasiado potente. Como decía al hablar de las características técnicas, este cabezal es el que está pensado para la estimulación del clítoris. Pero yo desistí de ello. Prefiero el extremo más pequeño. Lo primero, por manía personal. Me gustan los estimuladores pequeñitos o de punta pequeña porque con ellos dispongo de una estimulación más precisa, más focalizada. Pero ya os digo que esto es cuestión de gustos, simplemente es como me gusta a mí.

Lo segundo es porque me resultó demasiado potente. Para que os hagáis una idea, la mano (y lo que no es la mano) se me quedaba tonta. Lo que me generaba al final una sensación de hormigueo un tanto incómoda. Por lo que lo descarté como estimulador de clítoris. Aunque lo recuperé como masajeador en general y de zonas erógenas en particular. Al ir recorriendo el cuerpo y no tener que centrarnos en una zona en concreto, desaparece esa sensación de hormigueo.

Conclusión: Flexibilidad y estimulación del cabezal pequeño notable alto. Potencia del cabezal grande excesiva para mi gusto, aunque es ideal si lo que buscáis es potencia.