De compras por Placeres Secretos

Vamos a realizar un pequeño repaso a los distintos tipos de vibradores que hay disponibles en el mercado de la mano de la tienda erótica Placeres Secretos.

¿Por qué realizar este nuevo repaso de la mano de los Placer Secretos? Muy sencillo, porque este post está patrocinado. ¿Por qué os cuento esto? Porque es mejor dejar las cosas claras desde el principio y no dejar a nadie con la duda de: ¿le habrán pagado por escribir este artículo? Pues ya lo sabéis. Sí. Aunque también quiero dejar clara otra cosa, que te paguen por un artículo, no significa que compren tu opinión. Son dos cosas muy distintas. Igual que soy sincera con quienes leéis esto, lo fui con ellos para poder hablar con libertad. Como son gente que también quiere que se sepa todo lo que existe y que quieren hacerlo llegar a todo el mundo, iniciado o no en la juguetería erótica, me pidieron que hablase de eso, de juguetes y de tipos de juguetes, para que cada persona pueda elegir lo que más le guste o apetezca en cada momento.

Aclarado este punto, sumerjámonos en lo verdaderamente importante, los juguetes eróticos. En concreto, en los diferentes tipos de vibradores que os podéis encontrar en el mercado en general y en Placeres Secretos en particular.

Balas vibradoras

Empecemos el repaso por lo básico. Y, ¿qué es lo básico? Pues para mí, las balas vibradoras. Una especie de vibrador de emergencia. Un juguete que, por su tamaño, siempre puedes tener a mano y usar en caso de calentón de emergencia. Y es que, su mayor virtud es su discrección.

Estamos hablando de minivibradores que miden unos 8 cm, lo que les convierte en el compañero ideal de viaje.  Se pueden guardar en casi cualquier sitio: un bolso, una mochila, una riñonera (que me sorprende que se sigan utilizando), incluso en un bolsillo del pantalón o chaqueta.

¿Sus desventajas? Sus prestaciones limitadas (aunque no insatisfactorias). Lo bueno es que son muy discretos, entran en la palma de la mano y no pesan casi nada. Son bastante económicos, su precio ronda los 10 eurillos o menos, pero son sólo de uso externo y suelen disponen de un único tipo de vibración. La mayoría sólo ofrecen una vibración continua a una intensidad determinada, aunque es cierto que hay modelos que disponen de distintos tipos de vibración.

Huevos vibradores

Aunque se pueden confundir con los anteriores, los huevos vibradores son más anchotes que las balas y son de uso interno. Son vaginales, es decir, están diseñados para ser introducidos en la vagina. Eso no quita que se pueda juguetear con ellos de manera externa recorriendo el cuerpo de tu pareja o el tuyo propio.

Para mí, la gracia de este tipo de juguetes está en el juego que ofrece el mando a distancia, sobre todo en pareja. Introdúcete el huevo (con ayuda de un poco de lubricante y dejando el cordón de extracción por fuera) y entrégale el mando a tu pareja para que juguetee con tu placer a capricho.

Si sois timidillos, jugad en la intimidad de casa. Pero si tenéis un puntito gamberrete, animad vuestros eventos sociales. Vuestras comuniones/bodas/bautizos, reuniones familiares, de vecinos, quedadas con amigos… pueden llegar a ser inolvidables. Os lo aseguro.

Anillos vibradores

Los anillos vibradores son anillos de silicona que se colocan en el pene cuya «piedra preciosa», es una bala pequeñita para estimular el clítoris.

Son muy económicos y creo que gracias a eso, a su precio, y a cierta campaña publicitaria que se hizo hace unos años, son bastantes populares y gozan de bastante aceptación. Aunque confieso que yo nunca les he terminado de pillar el punto. Todo sea dicho.

Un último apunte. Hay anillos de un sólo uso, para ser utilizados una sola vez, o recargables/reutilizables, con los que poder repetir experiencia siempre que se quiera. ¿Por qué os digo esto? Pues porque los de un sólo uso suelen costar «ná» y menos y si os dejáis engatusar sólo por el precio, puede que luego os llevéis un chasco al descubrir que simplemente eran tan económicos porque sólo servían para una vez. Por eso, no os tiréis de cabeza a lo más barato y pensad antes el uso que le queréis dar.

Estimuladores de clítoris

Sí, muchos vibradores pueden estimular el clítoris en un momento dado. Pero los estimualdores de clítoris se llaman así porque están diseñados específicamente por y para el clítoris.

En esta categoría se encontrarían mis adorados succionadores de clítoris (¡Dios salve a los succionadores de clítoris!). Por si aún no conocéis es el mecanismo de estos juguetes, no producen una vibración tradicional. Funciona por ondas, pulsos de vacíos generados por una lengüeta que se abre y se cierra. Este tipo de estimulación por ondas/pulsos, lo que provoca es que circule mejor la sangre y aumente así la sensibilidad del clítoris, estimulándolo muuuuuuuuuuuuuuuuucho más.

Vibradores de punto G

Volvemos a repetir argumento. Los vibradores de punto G se denominan así porque están diseñados para estimular específicamente el punto G. Por eso, este tipo de juguetes se caracterizan por estar ligeramente curvados en su punta para poder estimular así la pared anterior de la vagina.

Una fusión entre estimuladores de punto G y vibradores de clítoris, son los conocidos como conejitos rampantes. Vibradores de uso vaginal pero que cuentan con un pequeño saliente para estimular también de forma externa el clítoris. Se llaman así porque, tradicionalmente, ese saliente se asemejaba a las orejillas de un conejito.

Vibradores realísticos

Son vibradores que intentan reproducir un pene real. Personalmente son los que menos me llaman la atención porque para mi gusto pecan de exceso de venacas. Pero como en todo, esto es tan sólo una cuestión de gustos.

Existen vibradores realistas de todos los tamaños, colores y formas, pero su denominador común es que se trata de penes con glande, testículos y venas muy marcadas.

Vibradores anales

Para finalizar este repaso a los vibradores, lo hago con los grandes olvidados, los vibradores anales. Digo que son los grandes marginados porque, a día de hoy, todavía para algunos/as, hablar de estimulación anal, sigue siendo un tema tabú.

Pero que queréis que os diga, ano tenemos todos y todos podemos jugar con él. Y aunque hay vibradores anales pensados para los hombres, diseñados para la estimulación de su punto P, hay otros tantos que son unisex. Es decir, diseñados tanto para el disfrute de ellos, como de nosotras. Porque si queremos, aquí jugamos todos.

¿Qué os parece? Como podéis comprobar, opciones hay unas cuantas. Quien no juega es porque no quiere. ¡Animaros a jugar! Y dadle una oportunidad a Placeres Secretos, que se han portado estupendamente y estoy segura de que os atenderán genial con cualquier duda que tengáis.