La creatividad es uno de los aspectos que caracteriza a las relaciones sexuales en todo el mundo. Por ello, describir como “golosa” a una persona para darle un toque sexual es un hecho totalmente común.
En el ámbito sexual, es una costumbre utilizar todo tipo de términos y adjetivos para describir comportamientos y actitudes particulares. Por ejemplo, aunque en un contexto normal pueda utilizarse para denominar a una persona amante de los dulces, la palabra “golosa” también puede tener una connotación sexual.
De hecho, la fuerza de la costumbre ha hecho que todos vinculemos a la palabra golosa con algo sexual. En este sentido, hoy intentaremos descubrir el motivo que ha convertido a esta inocente palabra en un término con importantes connotaciones sexuales que, incluso, suele ser utilizada en e-commerces como sexplace.es/consoladores.
¿Qué significa la palabra «golosa»?
Si buscamos la palabra golosa en Google, podemos encontrar dos pequeñas definiciones de este término. La primera de ellas es “persona que gusta de comer dulces o golosinas”.
Por otra parte, la segunda definición hace referencia a su uso coloquial como un adjetivo que describe “que por sus buenas cualidades o características despierta apetito, deseo o codicia”.
De igual manera, para obtener más referencias podemos buscar en la web oficial de la RAE. La reconocida entidad nos indica que la palabra golosa/so es un adjetivo que se puede utilizar de la siguiente manera:
- Aficionado a comer golosinas.
- Deseoso o dominado por el apetito de algo.
- Apetitoso (que excita el apetito).
Como podemos ver, existe una definición “clásica” de golosa que no posee ningún tipo de connotación sexual. Sin embargo, en términos generales la palabra hace referencia a un determinado deseo de una persona, el cual no solo se limita a los dulces.
En el ámbito sexual, por ejemplo, se podría describir a una golosa como un tipo de mujer deseosa o de gran apetito sexual. Se trata de una connotación que forma parte de una tendencia de gran popularidad que relaciona términos inocentes e infantiles con determinadas actitudes sexuales.
Vestirse de colegialas con uniforme
Un ejemplo de estas tendencias que convierten a aspectos inocentes en comportamientos con connotaciones sexuales es el uso de disfraces de colegialas con uniforme. Cualquier persona podría preguntarse por qué disfrazarse de colegiala es una acción excitante para los hombres.
Según diversos psicólogos, ver a mujeres vestidas de colegialas es una fantasía sexual arraigada en el inconsciente de muchos hombres. Durante la secundaria, las mujeres tienden a madurar y a desarrollarse más rápido que los chicos, por lo que sus cuerpos tienden a ser mucho más atractivos.
A su vez, un gran porcentaje de chicas durante esta etapa suelen buscar novios o parejas en cursos superiores y de mayor edad. Por este motivo, los jóvenes tienden a ver a sus compañeras como chicas inalcanzables.
Como resultado de ello, se crea una especie de deseo, fetichismo o fantasía sexual hacia la vestimenta de colegiala con uniforme. En este sentido, la connotación sexual de la palabra golosa también puede tener una relación con este fetiche hacia las chicas más jóvenes e “inocentes” que se ven atraídas por hombres de mayor edad.
De igual manera, es importante destacar que no todos los términos utilizados en el ámbito sexual se relacionan con este tipo de tendencias. Por ejemplo, uno de los disfraces sexuales más populares es el de enfermeras sensuales o mujeres policías.
Términos y adjetivos con connotaciones sexuales
Además de golosa, existen muchas otras palabras, términos y adjetivos que poseen importantes connotaciones sexuales. Para conocer un poco más de cerca el amplio catálogo de términos que suelen utilizar los hombres para describir a las mujeres en el ámbito sexual, realizaremos un repaso por los adjetivos más comunes:
Juguetona
“Juguetona” es otro término que posee una gran similitud a “golosa”, ya que el concepto clásico de esta palabra hace referencia a una chica que le gusta jugar. Por supuesto, en el ámbito sexual, juguetona se puede relacionar con una mujer divertida que le gusta experimentar y hacer mucho más entretenida la experiencia sexual.
Motolita
Otro término que suele ser utilizado en el ámbito sexual, especialmente en los países latinoamericanos, es la palabra “motolita”. Se trata de un adjetivo que la RAE vincula con alguien “necio, bobalicón, poco avisado”.
Sin embargo, en el ámbito sexual, el término “motolita” es ideal para describir a una mujer que, a simple vista, parecer ser muy inocente, dulce e inofensiva. A pesar de este aspecto, una motolita posee un gran deseo sexual y logra conseguir lo que quiere en la cama.
Traviesa
Las mujeres juguetonas también pueden ser descritas como traviesas. Según el diccionario de la RAE, una persona traviesa suele ser descrita como inquieta o revoltosa.
Normalmente, este término suele ser utilizado para describir a niños, pero al igual que la palabra golosa, llamar a una mujer traviesa tiene una gran connotación sexual. De hecho, la RAE también relaciona el término “traviesa” con una persona que “que vive distraída en vicios, especialmente en el de la sensualidad”.
Como se puede, culturalmente, múltiples términos que podemos considerar como inocentes han sido rodeados con una importante cantidad de connotaciones sexuales de toda clase.
Chochete
Chochete es otro término que suele ser utilizado con connotaciones sexuales, ya que el origen de la palabra hace referencia a la vagina o vulva de una mujer. Por este motivo, el término “chocho” o “chochete” suele ser utilizado como pronombre para denominar a una pareja sexual o amorosa.
Dependiendo del contexto, chochete puede ser un término para referirse al órgano sexual femenino, o simplemente para denominar a una pareja.
Fresca
Entre los términos que más comunes suelen ser utilizados con connotaciones sexuales se encuentra la palabra “fresca”. Para la RAE, se trata de un adjetivo que describe algo “moderadamente frío”.
Sin embargo, en la cultura española, la palabra “fresca” tiene una importante connotación sexual al momento de describir a una mujer. Una mujer fresca puede ser descrita como descarada, “lanzada” o un poco “putilla”.
Es un adjetivo que suele ser utilizado para denominar a una mujer que no es considerada como decente debido a sus costumbres sexuales.
Estrecha
El término “estrecha” también forma parte de ese conjunto de palabras que no solo poseen un significado clásico, sino que, además, tiene una connotación en el ámbito sexual. En términos generales, cuando algo es estrecho tiende a ser ajustado, apretado o de poca anchura.
Culturalmente, se ha relacionado este término con un comportamiento sexual de algunas mujeres que poseen ideas restrictivas sobre el sexo. Se utiliza este adjetivo para describir a mujeres que suelen ser rígidas y que no poseen deseo sexual en su cotidianidad.
Guarra
Aunque existe una importante diferencia entre la palabra “golosa” y “guarra”, con estos dos términos ocurre lo mismo: ambos poseen un sentido sexual. Al mirar el diccionario de la lengua española, podemos observar que una persona guarra se caracteriza por su suciedad, es una persona desaliñada, grosera, sin modales y que es despreciable.
Actualmente, la palabra guarra se utiliza como un sinónimo de sucia con una connotación sexual, ya que se hace referencia a las mujeres que son promiscuas. De hecho, en la práctica se podría decir que una mujer “guarra” es una “puta” debido a su indebido comportamiento sexual.
Estos son algunos de los términos que poseen connotaciones sexuales, y que pueden ser utilizados para describir a una mujer. Como podemos ver, palabras tan simples y cotidianas pueden tener un significado totalmente distinto cuando son utilizadas en un ámbito sexual.
Frases y eufemismos sexuales
Como destaqué al inicio, cuando se trata de sexo, el lenguaje puede ser increíblemente diverso y cambiante. Por ello, además de existir palabras y términos que nos permiten describir determinados comportamientos sexuales, la lengua española también contiene múltiples frases y eufemismos sexuales.
Para conocer un poco más de cerca el amplio catálogo de eufemismos sexuales más comunes en España, a continuación, se destacan las frases más populares:
“Echar un polvo”
En el ámbito sexual, “echar un polvo” puede ser una de las frases más conocidas y populares en toda España. Normalmente, quien afirma que ha “echado un polvo” es una persona que ha tenido relaciones sexuales.
A pesar de la gran popularidad de este eufemismo sexual, la frase “echar un polvo” no siempre estuvo relacionada con la acción de tener sexo. Antiguamente, cuando los nobles españoles decían que echarían un polvo, querían decir que saldrían un momento a esnifar rapé, un tipo de tabaco en polvo.
Es importante señalar que las leyendas urbanas afirman que, además de esnifar rapé, los varones utilizaban esta excusa para separarse de sus esposas y encontrarse con sus amantes a escondidas. Por este motivo, “echar un polvo” es una frase que se relaciona estrechamente con la acción de tener sexo rápidamente.
“Poner mirando a Cuenca”
Otra de las frases con connotaciones sexuales que podemos encontrar en nuestra cultura es “poner mirando a Cuenca”. Se cree que esta frase nació a partir de la construcción de un observatorio astronómico por parte de Felipe el Hermoso mientras estuvo en Toledo.
Para los historiadores, el motivo de esta construcción fue que Felipe necesita un lugar privado para tener encuentros secretos con sus amantes. Al momento de subir a la torre, el monarca le decía a Juana la Loca, su esposa, que subiría para poner a una dama mirando a Cuenca y que así esta pudiera disfrutar de las increíbles vistas.
Al parecer, a los guardias de Felipe les causaba mucha gracia la excusa, ya que ellos conocían lo que ocurría verdaderamente y por ello, comenzaron a popularizar la frase “mirando a Cuenca”.
“Comer el higo”
Entre los eufemismos sexuales más utilizados y conocidos por los españoles se encuentra la frase “comer el higo”. Para los griegos de la antigüedad, el higo era un fruto que se encontraba estrechamente ligado a la fertilidad, ya que se encontraba en las manos de la diosa Demeter.
Esta diosa griega no solo era la deidad de la agricultura, sino que, además, era conocida como la diosa de la fertilidad. Como resultado de ello, la cultura judeocristiana se encargó de establecer una especie de relación simbólica entre el higo y el órgano sexual de las mujeres.
“Tocar la zambomba”
“Tocar la zambomba” es uno de los eufemismos sexuales más utilizados en España, y cuyo origen se remonta al siglo XV. Fue en esta época cuando los esclavos africanos trajeron este instrumento a la Península Ibérica.
Aunque para los africanos, la zambomba es un instrumento que suele tocarse en ritos de preparación sexual y ritos de fertilidad, en España existe otro modo de ver a esta actividad. “Tocar la zambomba” es una frase con connotaciones sexuales, ya que se utiliza como un sinónimo de la masturbación masculina.
El principal motivo de ello es la similitud entre la forma en la que se toca la zambomba y la acción de masturbarse. Tan solo es necesario ver a una persona tocando la zambomba para ver la similitud entre ambas actividades recreativas.
“Poner los cuernos”
Finalmente, entre las frases y eufemismos sexuales más utilizados en España, y en gran parte del mundo hispanohablante, se encuentra “poner los cuernos”. Sin duda, se trata de una frase totalmente conocida y que, quizás, todos hemos utilizado alguna vez.
Realmente, no existe una explicación única para el origen de esta frase. Sin embargo, los lingüistas han relacionado la frase “poner los cuernos” con el mito griego del Minotauro, quien fue producto de una relación adúltera.
De igual manera, podría existir una relación entre esta frase entre los vikingos y el mito de que colocaban sus cascos con cuernos en las puertas para notificar que estaban haciendo uso del derecho de pernada. Sin embargo, esta segunda versión es muy poco apoyada por los historiadores.
Estos son algunos de los eufemismos, frases y términos con connotaciones sexuales más utilizados en España. Sin duda, hemos realizado un gran repaso por algunas palabras con doble sentido que mayor popularidad poseen en la lengua española. De esta manera, ha sido posible observar cómo una simple e inocente palabra como “golosa” puede ser utilizada para describir a una mujer con connotaciones sexuales.
Carla Mila dice
Curiosa la etimología de muchas expresiones.
Pero lo cierto es que si es yo escucho «golosa», me imagino a una mujer delante de un escaparate de dulces. Debe ser que ya no me pongo al día. Menos mal que con tus pos aprendo.
Un saludo y gracias por compartir.
Maryasexora dice
Jajaja, si pusiéramos una imagen a tu definición de golosa saldría mi cara. Con lo que me gustan a mi los dulces…
Gracias a ti por la visita.
Besicos.
Ester Álvarez G. dice
Lo de «motolita» nunca lo había escuchado, jaja. 😀
Gracias por contarnos. 😉
Maryasexora dice
Gracias por la visita!
Besicos.