¿Por qué hacer un artículo sobre la vulva a estas alturas de la vida? Porque a día de hoy todavía hay muchísimas mujeres que no le han dedicado ni un minuto de su vida, porque otras tantan piensan que su vulva y su vagina son lo mismo, porque todavía quedará alguna descarriada que ni sabe que su vulva es a lo que toda la vida ha llamado «sus partes»… Por estos y otros tantos motivos, hoy vamos a descubrir o redescubrir nuestra vulva.
¿Qué es la vulva?
Es el conjunto de órganos genitales externos femeninos. Rodea la abertura de la vagina y el conducto urinario y está compuesta por: los labios externos, internos, el clítoris y el monte de Venus. Básicamente es lo que veríamos si nos pusieramos un espejo entre las piernas.
¿Qué no es la vulva?
No es ni el chirri, ni «ahí abajo», ni «mis partes».
Es una parte más del cuerpo y como tal, tiene denominación específica. Cuanto antes lo asumamos mejor, antes nos quitaremos tonterías de encima, connotaciones negativas y definiciones que lo único que hacen es confundir al personal.
Si cuando somos pequeños nos enseñan de manera natural qué son y dónde están los ojos, las orejas, las rodillas… ¿por qué no mantenemos esa naturalidad con los genitales? Pues porque les añadimos un carácter erótico y sexual que hace que nos de vergüenza hablar de ello con los niños.
Ya… pero es que esa percepción sexual es nuestra, no de los niños. Ellos con lo único que se van a quedar es con que se llama vulva. Y como mucho, estarán varios días intentando colar esa palabra en cualquier conversación para demostrar que saben una cosa más. Pero como lo harán con cualquier otro nuevo concepto. Y ya está. No os penséis que van a volver a sus casas corriendo a experimentar de manera compulsiva con sus genitales sólo por decirles pene y vulva. Experimentarán de manera complusiva con sus genitales más adelante, eso seguro, pero eso lo harán independientemente de si llamamos o no a cada parte por su nombre. Así que vamos a hacer bien las cosas. Por favor.
Si desde el principio, llamamos a las cosas por su nombre y le damos el valor que tienen, ni más ni menos, luego nos ahorraríamos muchos problemas. Que puedo entender que con 5 años hace mucha gracia que venga tu niña y te diga que le pica el tete, la chirla, la perlita, la cosita… y demás palabras terminadas en «ita». Pero es de lo más deprimente que te venga una chica de treinta y pico años y te diga que le escuece «ahí abajo» o «en sus partes» porque le da vergüenza decir vulva, porque ha crecido con la idea de que esa palabra implica algo prohibido, feo, sucio y lascivo. Pero la vulva no es ni algo prohibido, ni feo, ni sucio, ni lascivo.
Ni es fea, ni sucia, ni algo lascivo
El origen de querer «suavizar» el término utilizando definiciones que acaben en «ita» y de asociarlo con algo sucio y feo es el mismo: la falta de educación sexual.
Nos autocensuramos por falta de educación sexual, porque lo único que nos han enseñado es que el sexo sólo sirve y sólo se puede mantener para reproducirse, y si ese no es el objetivo, estamos haciendo algo sucio, lascivo y reprochable. Y eso no es así. Mirar y tocar sirve para autodescubrirnos y conocernos mejor, y eso jamás puede ser algo malo. Lo que está mal y es triste, es que en el siglo XXI todavía haya mujeres que no conozcan sus genitales.
Con respecto a si es fea o no, yo no creo que exista ninguna vulva fea, simplemente es que no estamos acostumbradas a mirarlas. Entre eso y que nunca nos han enseñado a mimarlas y quererlas como es debido, pues… Pero no hay vulva fea.
No es la vagina
Por desgracia, confundir vulva con vagina es un error bastante común. Ya hemos dicho que la vulva es el conjunto de órganos genitales externos que rodea la vagina y el conducto urinario. La vagina en cambio, es un órgano genital interno que va desde el útero hasta la vulva. Si nos ponemos un espejo y miramos, lo único que veríamos de la vagina es su apertura externa justo debajo de la abertura urinaria. En el dibujo anterior lo podéis ver perfectamente, pero es mejor coger un espejo y verlo en vivo y en directo.
Y aprovechando que me has hecho caso (por una vez) y te has animado a redescubrirte, vamos a ver uno a uno los órganos que componen la vulva.
La vulva está compuesta por…
- Monte de Venus. Es el montículo con forma de triángulo invertido que se encuentra sobre el hueso del pubis y que está cubierto de vello púbico.
- Labios mayores o externos. Son dos pliegues que nacen bajo en monte de Venus y que rodean la abertura urinaria y vaginal. Están cubiertos de vello también, pero en cuanto a tamaño y apariencia varía de mujer a mujer.
- Labios menores o internos. Se llaman así porque se encuentran entre los labios mayores. Son dos pliegues que nacen en el capuchón del clítoris y que rodean la abertura urinaria y vaginal. Igual que antes, el tamaño de estos labios puede variar muchísimo de una mujer a otro. Mientras que unas los pueden tener escondidos dentro de los mayores, que no le sobresalen, otras los pueden tener muy prominentes y sobresalir.
- El clítoris. Mi parte favorita… Al clítoris ya le dediqué un post bastante completo así que no me voy a extender más en este punto.
- Vestíbulo vulvar. Área que se encuentra dentro de los labios menores y que engloba la apertura urinaria y vaginal.
- Apertura de la uretra. La uretra es el conducto que va desde la vejiga hasta el exterior y que permite la micción. Lo que nosotras veríamos sería la parte externa de la uretra. Si nos fijamos en la foto anterior, está justo encima, un poco más arriba, de la abertura vaginal. El orificio más pequeño.
- Apertura vaginal. Como acabamos de ver, es la parte externa de la vagina.
Y hasta aquí el post de esta semana. Espero que este artículo sirva para que alguna de las presentes se anime a redescubrir su vulva. Con que lo haga una sola, yo ya sería feliz.
¡Ah! si os queda alguna duda o en algo no me he explicado del todo bien, visitad la web de Cristina Callao. Hace un tiempo realizó un artículo muy completito sobre la vulva que os despejará cualquier posible duda.
Carla Mila dice
Sinceramente, a mi es que el término me parece el correcto. El resto suena ridículo. Además, ni suena mal. Yo también me pregunto porqué no se llaman a las cosas por su nombre.
En fin, magnifico artículo, como ya nos tienes acostumbradas.
Gracias y feliz semana
Maryasexora dice
Es que es el término correcto. No hay necesidad de endulzarlo. La rodilla es rodilla, la columna es la columna y la vulva es la vulva. Sin más. Es otra parte más del cuerpo y como tal se debería de estudiar y aprender.
Gracias a ti por estar ahí una semana más.
Besicos.
Mamanoleas dice
¡¡A amarse las vulvas se ha dicho!! Tienes razón, entre la falta de educación, los tabús y las vergüenzas la vulva siempre ha tenido mil nombres que lejos de hacerla más ‘fina o cariñosa’ la vuelve ridícula. Llamemos a las cosas por su nombre, que ya va siendo hora…
Besotes.
Maryasexora dice
¡Claro que sí! ¡La vulva es bella! Hay que descubrirla, mimarla y quererla.
Como le decía a Carla, no hay que edulcorar nada, se trata de llamar a las cosas por su nombre.
Besicos
David Rubio dice
Tienes razón, el lenguaje no es del todo inocente. Se tratan de disfrazar términos, con resultados ridículos, y ello se corresponde a la falta de naturalidad con la que concebimos, todavía en el s. XXI, el sexo. Quizá esa sea la razón por la que la vulva o el pene sean las palabras con más sinónimos metafóricos del idioma. Y en muchos casos con componentes despectivos. Muy interesante, como siempre. Saludos!
Maryasexora dice
Efectivamente, se trata de disfrazar términos con los que no estamos cómodos. Por desgarcia, todavía queda mucho camino para normalizar el sexo, para verlo y hablar de ello de manera natural.
Muchas gracias por la vista y por tu comentario.
Un saludo.
Ars Eroticas dice
¡Vivan las vulvas y las vaginas! Qué razón tienes, una vez más la educación en la vergüenza hace que no seamos naturales con una de las partes más importantes de nuestros cuerpos. Nos quedará la esperanza en ir cambiando la forma de educar y hacerlo de forma natural y positiva.
Un abrazo!
Maryasexora dice
¡Viva! ¡La vulva es bella!
Yo también espero y estoy convencida de que la cosa cambiará y de que llegará el día en que podamos hablar con naturalidad y en positivo del sexo.
Besicos.
genesis dice
excelente informacion.
Maryasexora dice
Gracias.